Desde pocos sitios puede verse una panorámica tan extraordinaria del pueblo de Cadalso de los Vidrios como desde Peña Murana, una interesante formación granítica de 1.044 metros de altitud, escarpada, rodeada de risco y precipicios y que es todo un hito de este pueblo de la Sierra Oeste madrileña.
El ascenso a la Peña de Cadalso, como también se la conoce a la Peña Murana, es fácil, breve y pueden completarla personas sin ninguna experiencia en estos temas. Sin embargo, el tramo final para acceder a lo más alto de la cumbre resulta algo más complicado, ya que hay que trepar entre rocas.
Se trata de una ruta lineal que va subiendo suavemente entre pinares y formas graníticas moldeadas por la erosión, con una interesante riqueza paisajística. Si uno va a Cadalso de los Vidrios debe hacer esta ruta.
Partiendo desde la Plaza de Toros Monumental Metálica del puelo, la distancia aproximada es de 2,6 km, el desnivel de unos 175 metros y la duración del recorrido es de unos 45-60 minutos.
La bajada se hace por el mismo camino. No obstante los más experimentados pueden optar por descender por la cara sur, cortada abruptamente y con una notable pendiente.
Sea cual sea su condición física y su experiencia en este tipo de actividades, se puede subir a esta peña de enrome valor geomorfológico y situada entre las Sierras de Guadarrama y Gredos, un paraje inolvidable.
Cadalso de los Vidrios es pueblo ubicado a unos 82 kilómetros al suroeste de Madrid, en el límite con las provincias de Toledo y Ávila. Se trata de un pueblo serrano protegido al amparo de la sierra de Gredos que ha sabido mantener su encanto y atractivo monumetal, si bien algo alterado por las urbanizaciones de chalés de los últimos años. Pero todavía tiene mucha esencia rural.
Foto vía Madrid Free