El paseo de Pintor Rosales se halla entre la calle Ferraz y el paseo de Moret, en el barrio de Argüelles y con paradas de metro en Argüelles o Plaza de España. Se trata de unos de los paseos más bonitos y concurridos de todo Madrid. Es un lugar ideal para pasear, relajarse y disfrutar de una bello día en la capital de España. El nombre se debe al pintor madrileño Eduardo Rosales.
Si uno camina por el paseo Pintor de Rosales, no le quedará más remedio que adentrarse en el Parque del Oeste que limita con esta calle madrileña. Varios caminos de tierra conducen al corazón del parque. Una vez en el parque, uno cuenta con varios lugares maravilloso y otros solitarios, además de bellas vistas de buena parte de la ciudad. Asimismo, destaca un grupo escultórico dedicado a la Infanta Isabel (1851-1931) en pleno paseo del Pintor Rosales.
Siguiendo por el paseo del Pintor Rosales uno llegará al magnífico Templo de Debod, una joya de la arquitectura del Antiguo Egipto que luce orgullosa en el Madrid del siglo XXI. Además, hay que visitar la Rosaleda, abierta desde las 10.00 a las 20.00 horas y donde se cultivan maravillosas rosas. Cada primavera se realiza un concurso para premiar la más bella.
Asimismo, el paseo del Pintor Rosales camino de Moncloa ofrece numerosos locales y establecimientos para cubrir todas las necesidades. Bares de copas y discotecas como El Balcón de Rosales; heladerías, como Haagen-Dazs o Brun en la esquina de Marqués de Urquijo; un restaurante italiano de decoración minimal como Primola o un argentino com la Vaca Argentina; una creperie y una chiringuito, justo en la esquina con Rey Francisco; o la Taberna de los Porches, donde, además de tapas y ensaladas de buena calidad, ofrecen una de las mejores tortillas de Madrid.
En definitiva, un lugar maravilloso para descubrir el corazón madrileño y también un sitio ideal para una cita romántica. Otro rincón mágico de Madrid.
Foto vía Entre dos amores